Fotografía: Fran Gala @erfran72 |
Nunca ha creído en esas cosas. No es amiga de supercherías.
Pero la curiosidad le quema. Y los ojos de la gitana le inspiran confianza férrea
aunque no sabe muy bien por qué. Se decide a acercarse hasta la mesita de
camping en la que tiene colocados todos sus enseres sobre una tela oscura
estampada con soles y lunas. Está descolorida y tiene los ribetes descosidos
por las esquinas. Huele a incienso y a romero.
La mujer le hace una seña con la cabeza para que se siente
en la barquilla desgastada que hace las veces de taburete. Con gesto seco le
pide que acerque su mano hacia ella.
Extiende la palma hacia arriba sobre la mesa y se queda muy
quieta. Se miran fijamente, ella no se atreve ni a pestañear. No quiere que las
sombras caprichosas que surgen del pequeño candil, única iluminación de la que
disponen, la distraiga.
Tú has sufrido mucho, “mihija”. Me lo dice la línea de la
vida. Has sufrido por familia, por dinero y por los hombres. Pero sobre todo
has sufrido por desobediencia y rebeldía. Tú tienes cara de ángel, eres buena
de nacimiento. Los demás te dicen que tus actos de bondad te guiarán hasta el
Cielo. Pero tú no quieres cielos, ¿verdad? Tú lo que ansías es sentir la tierra
y que la tierra te sienta a ti. Y para conseguirlo te has rebelado contra los mandatos
que te dicta el destino. Te has negado a seguir sus directrices.
Reivindicas tu derecho a decidir por ti misma si abres una
puerta o cierras una ventana. No quieres dejar nada al azar. El azar te cae
mal. Porque el azar es el muro tras el que se escudan los cobardes. Y no
quieres ser cobarde. Buena, pase. Cobarde, nunca. Y por eso tanto sufrimiento.
Aquellos que se dejan llevar no padecen, el destino decide
por ellos. Tú, sin embargo, llevas el dolor marcado a fuego en el alma. Por
negarte a dejarte arrastrar por la corriente de la vida. Por nadar con todas
tus fuerzas hacia donde nace el río.
Tú tienes cara de ángel, “mihija”. Pero tú no eres un ángel.
Tú eres un ángel caído. Y ahora que ya sabes esto, deja de sufrir. Porque lo
que te ocurre es bueno, pese a lo que los demás puedan creer. No
les escuches. Tú forjarás tu propio destino, te reirás del azar y marcarás tu
camino.
Somos ángeles caídos.
Texto: Rosa Muro @pink_wall
Por un momento me he visto sentándome, y mostrando la mano palma arriba. Rosa, tú eres muy bruja, criatura.
ResponderEliminarNo sé muy bien cómo tomarme eso viniendo de ti Julián! Jajaja! Ahora en serio, muchas gracias! Encantados de tener un seguidor tan fiel! :-)
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